Biscuit helado de queso y fresas
Hay ocasiones en las que apetece un helado y no queremos tirar de las marcas comerciales por la cantidad de conservantes, grasas y azúcares que llevan. Una solución perfecta, especialmente si no contamos con heladera en casa, es preparar un biscuit helado como este de queso y fresas.
El biscuit, a diferencia del helado tradicional, no cristaliza y no necesita heladera. Tampoco necesita que lo saquemos del congelador y removamos la mezcla cada cierto tiempo. Una vez dentro nos podemos olvidar de él hasta que sea momento de disfrutarlo. Se puede acompañar de fresas frescas o cualquier otra fruto rojo. Las frutas del bosque le van especialmente bien.
INGREDIENTES (PARA 6 RACIONES)
- 200 ml de nata líquida para montar, mínimo 35% M.G.
- 3 yemas de huevo
- 50 g de azúcar
- 150 g de queso crema
- 200 g de mermelada de fresas
- 50 ml de agua
ELABORACIÓN
1. Introducimos la nata y el accesorio batidor en la nevera durante, como mínimo, un par de horas. Ambos han de estar bien fríos para que la nata monte en condiciones.
2. Instalamos el accesorio batidor sobre las cuchillas de la olla inox, vertemos la nata y programamos EXPERTO, 30 segundos, velocidad 7 para semi montar la nata. En caso de estar demasiado líquida, batimos unos segundos más.Vertemos la nata semi montada en un recipiente hondo y amplio y reservamos en la nevera.
3. Sin necesidad de limpiar la olla, colocamos las yemas de huevo y el azúcar en el interior de la olla inox. Re colocamos el accesorio batidor y programamos EXPERTO, 2 minutos, velocidad 7 para blanquear la mezcla.Añadimos el queso crema, previamente batido y a temperatura ambiente, y programamos nuevamente EXPERTO, 30 segundos, velocidad 7.
4. Vertemos la mezcla anterior en el recipiente con la nata semi montada y removemos con suavidad. Lo haremos con suavidad y movimientos envolventes, poco a poco y sin añadir más hasta que no se haya incorporado en condiciones el añadido anterior.Vertemos la mezcla en un molde rectangular, forrado con papel vegetal (para que sea más fácil desmoldar), e introducimos en el congelador durante una hora.
5. Mientras tanto lavamos la olla inox e introducimos en ella la mermelada y el agua. Programamos 4 minutos, velocidad 1A, temperatura 110ºC.Pasamos por un colador y dejamos enfriar.
5. Transcurrido el tiempo de reposo del biscuit, lo sacamos del congelador y vertemos por encima parte del coulis de fresas. Hacemos una espiral con una brocheta y volvemos a introducir en el congelador hasta que esté congelado.
6. Servimos con el resto del coulis de fresas y semillas de sésamo tostado para aportar un toque crujiente.